Escondida en el pintoresco pueblo costero de Selong Belanak, en la isla indonesia de Lombok, se encuentra una joya oculta que promete una escapada inolvidable del ajetreo de la vida cotidiana: Villa Kanan. Esta exquisita villa es un remanso de tranquilidad y lujo que ofrece un refugio idílico a los viajeros que buscan un trozo de paraíso. La villa está estratégicamente situada en la ladera de una colina, con impresionantes vistas panorámicas del océano Índico y las exuberantes colinas que la rodean. Esta ubicación privilegiada permite a los huéspedes disfrutar de la belleza natural de la región, con playas vírgenes y verdes paisajes a tiro de piedra.
Alojarse en Villa Kanan es un viaje al lujo. La villa cuenta con diversas habitaciones y suites, todas ellas meticulosamente decoradas con muebles artesanales y modernas comodidades. Tanto si elige la habitación Deluxe con terraza privada como la lujosa suite con vistas al océano y piscina, se sentirá envuelto en lujo y confort. La mezcla de elementos de diseño balinés y contemporáneo crea un ambiente acogedor que le permitirá relajarse y rejuvenecer.
El corazón de Villa Kanan es su atractiva piscina infinita, que parece fundirse a la perfección con el océano. Rodeada de exuberantes jardines tropicales, la zona de la piscina es un oasis de serenidad donde los huéspedes pueden tomar el sol o un cóctel mientras contemplan la puesta de sol en el horizonte. Es el lugar perfecto para relajarse y empaparse de la belleza natural de Lombok.
Las zonas interiores de Villa Kanan destilan calidez y elegancia. Los huéspedes pueden relajarse en lujosas habitaciones y suites, equipadas con modernas comodidades y terrazas privadas. El restaurante del hotel sirve deliciosa cocina indonesia e internacional, y el spa ofrece una serena escapada de relajación. El compromiso de Villa Kanan con la sostenibilidad es evidente en todo el complejo, que crea una atmósfera ecológica y acogedora para los huéspedes.
Para quienes deseen mimar sus sentidos, Villa Kanan ofrece una experiencia de spa sin igual. El spa es un santuario de relajación y rejuvenecimiento, que ofrece una gama de tratamientos inspirados en las tradiciones locales y con ingredientes naturales. Un masaje balinés o un exfoliante de coco son la forma perfecta de relajarse tras un día explorando la isla.
Explorar los alrededores es una obligación si se aloja en Villa Kanan. La playa de Selong Belanak, de arena blanca y suave oleaje, está a un corto trayecto en coche. Los entusiastas de los deportes acuáticos pueden practicar surf y snorkel, mientras que los amantes de la naturaleza pueden explorar los bosques y cascadas cercanos.